La alergia primaveral afecta a cerca de 8 millones de españoles, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Crónica, y es más frecuente en ambientes urbanos que rurales ya que la contaminación atmosférica favorece su efecto.
En la alergia primaveral, el antígeno, es el polen. Durante la polinización, una sola planta produce miles de granos de polen (En España, el polen de las gramíneas es la mayor causal).
Los principales síntomas de las alergias primaverales son:
- Conjuntivitis.
- Congestión nasal y estornudos, picor en nariz, garganta y paladar.
- Dificultad para respirar, tos y pitidos. (asma polínica)
- Dolor de cabeza.
- Dificultades para conciliar el sueño.
- Tristeza e incluso depresión.
- Migrañas.
La alergia es una respuesta inmunológica excesiva frente a una sustancia llamada antígeno, en un individuo. El origen de una alergia está en quien la desarrolla, y no en el antígeno. Con este último concepto claro, no podemos culpar sólo a los alergenos.
Si la alergia depende más de la respuesta del individuo y no solo del antígeno, ¿por qué no pensar que las situaciones emocionales y el estrés pueden hacer que se desarrolle más o menos esta condición?
Se ha demostrado que el estrés y la ansiedad están muy relacionados con la aparición de las alergias.
El estrés físico y emocional empeora los síntomas de alergia, ya que el sistema nervioso activa las mismas células que se activan en una reacción alérgica. Si el estrés es constante puede acelerar o incluso generar alergia en quien no la manifestaba.
Teniendo en cuenta todo lo expuesto, no es suficiente tratar a las personas solo desde el punto de vista médico, aliviando los síntomas, sin resolver el problema de fondo. Si queremos resolver el problema de la alergia empeorada por estrés, debemos usar herramientas que reduzcan su repercusión en el organismo.
Si además, siendo emigrantes, estamos pasando por todos los cambios adaptativos, climáticos, sociales, culturales, legales etc, es muy frecuente que nuestra mente y cuerpo estén en estado de estrés, por lo cual, las alergias podrían empeorar, no solo por ser la primera exposición a ese alergeno, sino por que las emociones que a veces se asocian al proceso migratorio pueden deprimir el normal funcionamiento del sistema inmune.
Las recomendaciones para la alergia primaveral, no solo serán las tradicionales como:
- Mantener cerradas las ventanas y puertas de la casa y coche para evitar que entre el polen.
- Intentar no salir al exterior los días en los que el recuento de pólenes sea elevado, especialmente los días de viento. (consultar www.polenes.com.)
- No secar la ropa al aire libre ya que el polen puede impregnarse en ella.
- Usar gafas de sol y una mascarilla que cubra nariz y boca si vas a permanecer largos períodos de tiempo en el exterior.
- Extremar la higiene de las manos y la cara, refrescando con frecuencia la nariz y los ojos con agua.
- Realizar una limpieza del hogar frecuente utilizando aspiradores en lugar de escobas o utensilios que remuevan las partículas.
- Cuando se haya estado al aire libre, es recomendable ducharse y cambiar de ropa al llegar a casa.
- Usar filtro antipolen en el coche y purificadores de aire en casa para reducir la exposición al alergeno.
- Es aconsejable seguir un tratamiento integral enfocado a tratar la causa de la alergia. De la mano de un médico, la inmunoterapia, más conocida como vacuna de la alergia, es un tratamiento que consiste en la administración -por vía subcutánea o sublingual- del elemento que provoca la alergia en dosis cada vez más elevadas, hasta un máximo preestablecido por el médico especialista en Alergología. También el uso de antihistamínicos que son fármacos que bloquean la acción de la histamina, una sustancia química que genera nuestro cuerpo que provoca síntomas propios de la alergia.
Sino que además, para el manejo del estrés debemos priorizar:
- Técnicas de respiración y de relajación.
- Crear hábitos o actividades regulares que nos generan bienestar y nos ayudan a desconectar.
- Ejercicio físico. El yoga es uno de los más recomendados.
- Alimentación saludable evitando los ultraprocesados y azúcares.
- Descanso y sueño. Tenemos que conseguir un sueño reparador. Esto facilita que nuestro cuerpo se recupere. Y ayuda a evitar que se acumulen los efectos no deseados del estrés. Limitar el consumo de estimulantes como café.
El método MOVE creado por mi persona (Dra. Eugenia Benzaquén), involucra todos los puntos necesarios para el manejo de estrés en condiciones crónicas. Sus siglas significan: Mover el cuerpo y la mente en la gestión de emociones y estrés, Organizar tus alimentos según tu tolerancia y objetivos, Valorar tu descanso, Enfocarte en tu objetivo de salud.
Te llevamos de la mano en cada uno de estos aspectos. Puedes tomar el programa MOVE desde cualquier parte del mundo y mejorar cualquier aspecto de salud que desees, incluyendo las molestas alergias. Solo con escribir un correo a muevete.contacto@gmail.com harás el primer contacto con la Dra. Benzaquen.
Escrito por Dra. Eugenia Benzaquén. Mayo 2019 para la revista digital http://www.nomadasconraices.com